
Notas verdes: el aroma de una serenidad lujosa
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Imagina que estás de pie sobre un césped recién cortado y exuberante, o dando un paseo matutino por un prado bañado en rocío.
Cierras los ojos e inhalas ese embriagador aroma "verde": fresco, armonioso y puro. Justamente de eso se trata la familia olfativa verde: la esencia de la naturaleza embotellada, lista para ser liberada.
Una rebelión fragante: el nacimiento de la familia verde
La familia olfativa verde surgió en la década de 1940 como respuesta al dominio de las fragancias pesadas, dulces y empolvadas en el mercado de perfumes. Fue la casa Balmain la que lanzó Vent Vert, la primera fragancia verdaderamente verde que sacudió el mundo de la perfumería. Su carácter revolucionario provenía del uso del galbano, una resina obtenida de la planta Ferula galbaniflua, originaria de Irán, Turquía y Asia Central. El galbano tiene un aroma penetrante y resinoso y forma la base misma de esta familia olfativa.
A medida que la perfumería evolucionaba, aparecieron nuevas moléculas sintéticas como el cis-3-hexenol (el olor del pasto recién cortado) y la hoja de violeta. Estas notas capturan perfectamente la esencia verde y cruda de tallos, brotes jóvenes y hierbas. Con el tiempo, los perfumistas comenzaron a mezclar notas verdes con acordes cítricos, florales y amaderados, creando composiciones ligeras y modernas, muchas de ellas unisex, que florecieron en los años 70 y 80. Esta época dorada nos dejó clásicos verdes icónicos como Chanel No. 19, Estée Lauder Aliage y YSL Y (no confundir con la versión masculina de 2017).
En los años 90, los perfumes verdes fueron perdiendo protagonismo. El mercado se inclinó hacia fragancias acuáticas y frutales-florales más dulces. A principios de los 2000, los perfumes gourmand tomaron el centro del escenario, haciendo que los aromas verdes parecieran demasiado minimalistas y austeros. Sin embargo, en los últimos años, con el creciente interés en la naturaleza, el bienestar y la perfumería de autor, las fragancias verdes han vuelto con fuerza: se las percibe como auténticas, limpias y encantadoramente sinceras.
¿Qué hace que una fragancia sea "verde"?
Además del galbano, el pasto cortado y las hojas de violeta, otros protagonistas clave de la familia verde incluyen la mate, el té verde, el ruibarbo y las hojas de grosella negra. Aunque hierbas como albahaca, menta y salvia se consideran técnicamente aromáticas, realzan maravillosamente el carácter verde de una fragancia.
Las notas verdes suelen encontrarse en la salida de una composición, otorgando un inicio vibrante, natural y energizante.
Pero lo verde no se trata solo de frescura y simplicidad. Combinadas con otras familias olfativas, las composiciones verdes pueden adquirir personalidades completamente nuevas. Mezcladas con pachuli o musgo de roble, se vuelven más profundas y misteriosas. Combinadas con especias, incluso pueden resultar sensuales y cálidas.

¿Cuándo y por qué usar notas verdes?
Los perfumes con base verde son increíblemente versátiles (aunque mucho depende de las notas complementarias). Son perfectos para el uso diario: escuela, universidad, trabajo o incluso entrenamiento. Transmiten una sensación de limpieza y frescura sin ser invasivos.
Son especialmente ideales cuando necesitas un reinicio mental: como un paseo por el bosque, calman y restauran el equilibrio. La primavera y el verano son las estaciones perfectas para que las notas verdes brillen con todo su esplendor: un acompañante fresco para actividades al aire libre.
¿Para quién son las fragancias verdes?
Las notas verdes suelen atraer a quienes valoran la simplicidad y pureza, tanto en el estilo personal como en la forma de vida. Tienen algo contemplativo y reservado, por lo que conectan con individualistas e introvertidos.
No suelen ser las favoritas del mainstream, dominado por notas florales, frutales o cítricas, y es precisamente por eso que prosperan en la perfumería de nicho, donde su mezcla única de claridad y complejidad puede destacar.
Un suspiro profundo en un mundo ruidoso
La familia olfativa verde es como un respiro profundo en medio del caos: pura, fresca y auténtica. Aunque estuvo a la sombra de tendencias más llamativas, hoy regresa con fuerza, demostrando que la naturaleza puede ser tan cautivadora como el lujo.
Los perfumes verdes no se tratan solo de frescura: representan equilibrio, carácter y el espacio entre las notas.
¿Y si fueran exactamente lo que estabas buscando?